lunes, 26 de diciembre de 2016

TV | Lemmy Kilmister. ¿God Is Dead?

Diciembre, probablemente el mes más esperado por muchos.
Llegan las vacaciones
Llega el dinero (o no)
Llega el amor, la prosperidad, la paz, las bendiciones
Llega el Santa Clos!
Llega el niñito Jesús con la Navidad y los regalos y la comida y el alcohol
Al parecer todos son felices, todo parece que mejora sustancialmente y que no hay preocupaciones por el mañana.
Llega la felicidad; llega  IAN FRASER KILMISTER, el rey LEMMY

Acá en este pequeño espacio celebramos la vida del Lemmy nomás porque se nos da la gana y porque somos admiradores del vato, porque se lo merece, porque fue su cumpleaños y porque hace un año su cuerpo abandono este mundo material. Y porque es deber recordarlo aunque sea con unas palabritas apenas cercanas a lo que se le quiere y lo grande que es.

Lemmy es Dios, en cada uno de los aspectos de la vida, muchos tal vez no comprenderán esto, pero así es, Lemmy es el famoso mesías, el salvador, el maldito ROCK y el PUNK y todo lo que alguna vez estuvo increíblemente bien en esta vida.
El hombre mas libre y salvaje que existió, aprendió a tocar la guitarra solo porque un día se le dio la gana y descubrió que así tendría más mujeres,  se atrevió a usar un bajo con distorsión sin temor alguno a nada,  nacido prematuramente capricornio y en sus palabras, salvado de ser acuario, tenía su propio tipo de sangre (altamente tóxica para el humano promedio). Según la leyenda; le enseño al Sid Vicius a tocar el bajo (que haya hecho papelones en escenarios ya no es culpa de Lemmy), alguna vez roadie de Jimi Hendrix, hasta los últimos días de su vida se mantuvo ebrio, dando conciertos por el mundo y afirmando ser indestructible, y Si. Lemmy dio su vida por el Rock & Roll.




Lemmy es el Dios de la especie, el humano que enseño a los demás como se hace el Rock arriba y abajo del escenario, Lemmy es el rock vuelto persona, gracias a el el genero más hermoso de la música se salvó y se alimento para continuar muchos años más en el planeta, gracias a el muchos encontraron la paz y la inspiración para vivir la vida, así se trate de Lars Ulrich o  de simples y comunes muchachitos como yo.

Al parecer esto ya se volvió una avalancha de elogios al tipo, pero, qué más voy a escribir yo acá si eso es lo que estoy sintiendo ahora, y lo que he sentido siempre, mi Lemmy es un inmortal, un genio, un grande. No te obligo a comprender esto ni a creerlo, es lo que hay aquí y ya.

¡Viva Lemmy hijos de perra!





Hago anuncio del programa que estrenamos en el blog, con un invitado de Los Angeles, productor y representante de las bandas más sonadas del momento, nos envía una pequeña revisión al nuevo material de Motörhead, chido.





No hay comentarios:

Publicar un comentario